El metro contamina
Uno de los lugares más contaminados y contaminantes de Santiago de Chile debe ser su metro. No es que esté sucio, la contaminación del Metro es visual y acústica.
Uno de los grandes problemas modernos es la info polución, y el metro está lleno de contaminación informativa.
Señalética que nadie entiende.
A los ruidos molestos que el mismo metro ya genera se suma el hecho de que cada vez que se abre un vagón, hay una voz dando órdenes a los autómatas trabajadores que suben o bajan, dictándoles reglas de comportamiento. Mensajes confusos, mal redactados, y dictatoriales. Sin mencionar los seudo policías que cuidan los pasillos y que uno no pase la linea amarilla.
Avisos, avisos, por todos lados, el metro es una gran tanda de comerciales.
Y lo peor es SubTV.
Pantallas planas de TV a todo volumen en los andenes y los vagones. Me ha tocado tener que tragarme una tanda de 15 a 20 minutos de comerciales dentro del vagón del metro, es peor que la TV.
Yo renuncié a la TV hace rato, no quiero ver TV, y el Metro de Santiago me obliga a ver la peor TV, el infomercial más insoportable de todos, ese que no puedes cambiar, o esquivar, porque sino no llegas a tiempo a tu trabajo.
El metro abusa. Sub TV abusa.
Con razón los santiaguinos estamos siempre estresados.
Lo peor es que esto va a ir empeorando, sobretodo ahora que viene Navidad, y hay que vender, vender, vender.
Sub TV debe desaparecer, o apagarse por un largo rato.